DIARIO EL TIEMPO – Piura.

Junto con sus compañeros “Frejol”, “Santoyo”, “Coyote”, el temido “Negro Albines” se había convertido en un símbolo de poder al margen de la ley en Catacaos  y el Bajo Piura. Entre sus víctimas figuran los transportistas, comerciantes y arroceros, a algunos de los cuales obligaba a pagar cupos diariamente a cambio de darles “protección”. Quienes no portaban en su carro la imagen de Sarita Colonia, es decir no pagaba, era  seguidos y asaltados.

El año pasado el propietario de una combi no pagó el cupo exigido. Los Albines se robaron el carro y lo escondieron en una parcela. La Policía ubicó y recuperó la unidad. Y la reacción del cabecilla “Negro Albines” fue matar en su chacra a un agricultor que él creyó había dado el soplo a la Policía. La denuncia llegó a la Divincri, pero no se llegó a descubrir nada. Tampoco en agosto cuando una mujer denunció al cabecilla de matar a su marido y a un familiar, en represalia por denunciarlo. Desde entonces, la Dirección General de Inteligencia del Ministerio del Interior habría decidido trasladar personal de Inteligencia desde Lima con la indicación de ponerle freno a la delincuencia organizada en nuestra ciudad.

El grupo policial que ayer frustró el asalto y robo  de 170 mil soles  a un comerciante, venía trabajando en diversos puntos de la ciudad desde hace más de dos meses y medio. Se sabe que se camuflaron en diversos ambientes, como sindicatos, asociaciones y pueblos, con el fin de captar información que lleve a uno de los grupos más agresivos del hampa local.

Entre la información detectada, encontraron que el cabecilla, presumiblemente como estrategia, nunca obtuvo DNI. Es decir, no figura en el Registro de Identificación y Estado Civil, de modo que en caso de ser intervenido podía dar diversas identidades, salir bien librado y evadir a la justicia. Sin embargo, ayer pocas horas después de salir a enfrentar a los agentes de Inteligencia que lo acribillaron con un proyectil de fusil AKM, sus familiares lo identificaron como el “Negro Albines”.

Visítanos en www.eltiempo.pe